sábado, 3 de octubre de 2020

Albert Costa,


Tenista español nacido en Lérida el 25 de junio de 1975. Cuenta con una de las carreras más regulares del tenis nacional y su punto fuerte está en el juego desde el fondo de la pista. 

 Formando pareja con Álex Corretja en la categoría de dobles, consiguió el bronce olímpico en Sydney 2000 y en 2002 se adjudicó en París el primer título de Grand Slam de su carrera.
A los catorce años se proclamó campeón de España en categoría infantil y en 1993 se convirtió en campeón de Europa sub-18 tras vencer, en Lisboa, al checo Jiri Novak. Alcanzó la categoría profesional y ganó el torneo Ciudad de Mar de Plata (Argentina) al imponerse en la final a Gaston Etlis.

La temporada de 1995 arrancó con muchas esperanzas para Costa después de vencer a Jim Courier en los cuartos de final de Roland Garros aunque, finalmente, el austríaco Thomas Muster truncó su camino hacia la victoria en París. La revancha llegaría en el torneo de Kitzbuehl (Austria), aquel mismo año, cuando Costa logró imponerse a Muster y adjudicarse el primer título importante de su carrera.

En 1996 se anotó los torneos de Gstaad, San Marino y Bournemouth y alcanzó la final en Dubai y Montecarlo. Consiguió escalar hasta el puesto decimotercero de la ATP y, al año siguiente, se colocó noveno en el ranking mundial, la mejor clasificación obtenida hasta entonces en toda su carrera deportiva. Aquella temporada se adjudicó el torneo Conde de Godó frente a Albert Portas.
En 1998 se proclamó campeón en Hamburgo y finalista en Roma y, al año siguiente, venció en los torneos de Estoril, Gstaad y Kizbuehel. En la temporada 2000 volvió a alcanzar la ronda de cuartos de final en Roland Garros, pero cayó derrotado frente a Franco Squillari.

Junto a Corretja, Balcells y Ferrero formó parte del equipo español de Copa Davis que el 10 de diciembre de 2000 se adjudicó, por primera vez en la historia del torneo, la ensaladera de plata. España venció en la final al combinado australiano, campeón en 27 ocasiones de la competición, después de derrotar en semifinales a Estados Unidos.

Perseguido por cierta fama de perdedor y de ausencia de mentalidad ganadora, la madurez de su juego explotó definitivamente en la temporada 2002. Alcanzó la final del torneo Conde de Godó y aunque perdió ante el argentino Gastón Gaudio, dio muestras de la innegable calidad de su tenis. Su entrenador Josep Perlas había sometido al jugador a un intenso trabajo psicológico y técnico que continuó dando resultados en Roland Garros, con la clasificación de Costa para cuartos de final después de jugar un partido impecable y eliminar al brasileño Gustavo Kuerten, tres veces campeón en París, por 6-4, 7-5 y 6-4.
La victoria sobre uno de los mejores jugadores del mundo dio alas al juego de Costa y en la siguiente ronda logró imponerse al argentino Guillermo Cañas con una exhibición de precisión técnica y fortaleza mental. Por primera vez en su vida, el jugador leridano alcanzaba las semifinales de un torneo del Grand Slam y no desaprovechó la oportunidad de colocarse en la final aunque, para ello, tuviera que apear del torneo a Álex Corretja, uno de sus mejores amigos, dentro y fuera de la pista. En el partido decisivo le esperaba un nuevo duelo “fraticida” con el tenista valenciano Juan Carlos Ferrero, que también debutaba como finalista en una cita de Grand Slam, y la superioridad de Costa se demostró incontestable. Su victoria por la vía rápida por 6-1, 6-0, 4-6 y 6-3 dio una nueva dimensión a su carrera y le colocó, en vertiginoso salto, en el octavo puesto del ránking mundial.

El título también le concedió plaza para disputar el Masters de Shangai, la última gran cita de la temporada a la que acuden las ocho mejores raquetas del año. Debutó con derrota frente al número uno mundial Lleyton Hewitt y, aunque en la segunda jornada se impuso al ruso Marat Safin en tres sets (3-6, 6-4 y 6-3), perdió su encuentro con Moyà y no logró alcanzar las semifinales del torneo de maestros. En los últimos días del año sumó un nuevo título nacional a su palmarés con la conquista, precisamente frenta a Moyà, del Masters de tenis de Castilla y León y finalizó 2002 en el puesto undécimo de la clasificación mundial ATP.

En el Open de Australia 2003, el primer Grand Slam de la nueva temporada, cayó eliminado en tercera ronda frente a Félix Mantilla. Después llegó a Roland Garros con el reto de defender el título de campeón y en la tierra batida de París volvió a mostrar su mejor juego. En cuartos de final se impuso a Tommy Robredo, jugador revelación del torneo que había conseguido derrotar a tenistas de la talla de Hewitt y Kuerten, y en semifinales se encontró con Juan Carlos Ferrero, precisamente su rival en la final de 2002. En esta ocasión, Costa perdió el duelo y fue Ferrero quien alcanzó la final y quien ganó, de nuevo para España, la Copa de los Mosqueteros. Una lesión de rodilla cerró su participación en Wimbledon.

Los últimos años en el Circuito de Costa no dieron grandes éxitos deportivos, pero sí la satisfacción personal de un tenista que, hasta su retirada oficial, el 30 de abril de 2006, supo mantener un excelente estado de forma y dio muestras de su talento en todos los torneos que participó, un ejemplo a seguir por las grandes figuras españolas de su siguiente generación, como el gran Rafa Nadal.

Albert Costa, como capitán del equipo español de Copa Davis

En el año 2008, se hizo cargo del equipo español de Copa Davis, como capitán. Su primera final fue en Barcelona en 2009, frente a la República Checa, donde España se proclamo campeona de la Davis (5-0) y Albert logró ser el primer español en conseguir la “ensaladera” como jugador y como capitán.
En diciembre de 2011, Albert Costa levataría su segunda Copa Davis (la quinta para España) como capitán del equipo español. España se impuso en la final a Argentina, con un tanteo de 3-1, donde Rafa Nadal consiguió el punto definitivo para España. La final se disputó en Sevilla.
Fuente:

No hay comentarios:

Publicar un comentario